Afundación desarrolla en Lugo su proyecto intergeneracional «Falamos da escola»
Afundación, la Obra Social de ABANCA, desarrolla una nueva edición de su programa intergeneracional «Falamos da escola», una propuesta que se inserta en la línea estratégica «El valor de la experiencia» que surgió como evolución natural del otro programa intergeneracional de la entidad, «Fálame da emigración». En el encuentro celebrado esta mañana en el IES Ollos Grandes de Lugo, cuatro personas voluntarias del Espazo +60 Afundación de Lugo, María Soledad Bravos, Mº Carmen Fernández, Honorio López y Josefa Rico, relataron en el aula ante los 26 estudiantes de 4º de ESO cómo fue su experiencia en la escuela de su niñez y adolescencia.
Las experiencias de las personas mayores en la escuela y la comparativa con la escuela de hoy es el hilo conductor del diálogo entre mayores y juventud en este proyecto, en el que han participado desde su inicio casi 1.100 estudiantes de 4º de ESO y 1º de Bachillerato de 22 centros educativos de toda Galicia y 66 personas mayores voluntarias, socias de los Espazos +60 Afundación. «Falamos da escola» se desarrolla en centros escolares situados en las localidades, y su área de influencia, en las que Afundación cuenta con un Espazo +60: las siete principales ciudades gallegas y las poblaciones de Viveiro, Betanzos, Pontedeume y Monforte de Lemos.
El encuentro en las aulas se inicia con un relato de las personas voluntarias participantes sobre su experiencia escolar, para que el alumnado comprenda las circunstancias de vida de su generación y el tiempo histórico que les tocó vivir. Para eso comparten fotografías, libros y objetos que ayudan a acercar las diferentes realidades escolares: escuelas populares gratuitas, escuelas pías, públicas, escuelas en domicilios particulares y también los relatos de quienes no pudieron ir a la escuela o las dificultades de las mujeres para acceder a la educación.
En un segundo encuentro, mayores y jóvenes, a través de dinámicas participativas, reflexionan conjuntamente para responder a la pregunta «¿Cual debe ser el papel de la escuela contemporánea?». Las diferentes aportaciones realizadas desde experiencias escolares tan dispares son puestas en común y agrupadas por temáticas en un gran panel en el que, finalmente, cada participante prioriza los cinco objetivos que considera más relevantes. El resultado final es una contribución original al debate educativo, realizado en clave intergeneracional.
El proyecto proporciona un marco de aprendizaje no formal que favorece la curiosidad, la empatía y la motivación del alumnado, al tiempo que contribuye a derribar estereotipos por ambas partes, en línea con el modelo de educación transformadora promovido por Afundación.