Comentarios
Con el poético encanto del figurín de moda, la modelo, cobra vida bajo las telas que se ciñen en el talle y aumentan de volumen en la cadera, por el miriñaque. Se cubre con capota atartanada, y enfunda sus manos en guantes blancos. La combinación de blanco, marrón y rosa da un aire elegante al conjunto, del que emana el romántico recuerdo de la moda de otra época.
Exposiciones
«Antológica de Federico Ribas», del 4 al 30 de abril de 1991, en la Sala de Exposiciones del Centro Cultural Caixavigo.
Reproducciones
«Federico Ribas», nº 25 de la serie «Grandes Artistas Gallegos», Catálogo de la Antológica.