OTERO BESTEIRO
Otero Besteiro, Francisco
( O Corgo, Lugo, 3 de marzo de 1933 - Madrid, 21 de mayo de 1994 )
Biografía
Personalidad insólita, artista multifacético, criatura extravagante, y sin embargo, entrañable. Y sobre todo, un escultor magnífico, irrepetible, con frecuencia genial. Se formó en la Escuela de San Fernando y pronto ocupó un lugar destacado en la vida artística madrileña. Realizó su primera exposición en el entonces Museo de Arte Moderno, bajos de la Biblioteca Nacional. Fue distinguido con la medalla de la Bienal de Alejandría por los años en que triunfaba otro gallego de origen, tan distinto a él, Cristino Mallo. Con motivo del centenario de Caixavigo, en 1980, figuró obra suya en las muestras sucesivas que abarcaron todo el arte gallego, y su aportación constituyó su presentación en Galicia. Inmerso en una bohemia elegante, diseñó joyas, que él mismo exhibía, tejidos y mil cachivaches, y fue cultivando su personal animalismo, de síntesis de criaturas animadas que son ejemplos creativos de excepción. Apenas realizó exposiciones, porque vivía rodeado de la aristocracia, la alta burguesía y la intelectualidad española. El premio Noble Camilo José Cela le distinguió con su amistad y le dedicó algunas breves páginas memorables. Suele estar ausente de las historias del arte al uso, sencillamente porque nunca se sujetó a normas, ni precisó de certámenes oficiales. Su afán de notoriedad le llevó a cultivar una figura personal inconfundible y en cierto modo muy estrafalaria, ya que vestía con ropas orientalizantes y llevaba sobre sus hombros un simio, con el que jugueteaba y asustaba a la clientela habitual del café de Gijón, cenáculo artístico madrileño hasta los años ochenta. Falleció en Madrid y la noticia de su muerte llegó tanto a los ámbitos intelectuales como a los sociales frívolos de las llamadas revistas del corazón. Otero Besteiro es un creador intuitivo y razonante a un tiempo, imbuido de magias y esoterismos, capaz de sintetizar las formas y de dar a la oquedad el valor de volumen. Sus figuras, en general de pequeño formato, resultan inconfundibles. Su materia preferida fue el bronce, y en múltiples están expandidas muchas de sus esculturas mejores, como buhos, lechuzas y otras aves nocturnas. Está representado en el Museo de Arte Contemporáneo, en algunos importantes de provincias y en colecciones institucionales, como el Carlos Maside, de Sada, A Coruña.
Bibliografía
-Pablos, Francisco: Plástica Gallega. Vigo, Caixavigo, 1981. -Campoy, A. M.: Diccionario crítico del Arte español contemporáneo. Madrid, Ibérico Europea de Edic, 1973. -Gran Enciclopedia gallega. Gijón. S. Cañada, Edit, 1973 y ss.